con

¿Qué herramientas y características de la Comunicación Popular puede tomar la Comunicación Sindical? Esta pregunta atravesó la segunda jornada de la I Conferencia Continental de Comunicación Sindical organizada por la Confederación Sindical de trabajadoras y trabajadores  de las Américas (CSA) este jueves 28 de octubre.

Ante el avance del individualismo, con mensajes que buscan justificar la esencia desigual del sistema capitalista y desconsiderar las demandas de la clase trabajadora, el movimiento sindical se plantea el desafío de llegar de forma más masiva a sus afiliados/as y a la sociedad en general.

Romper la estigmatización de la clase trabajadora, mediante la creación de una comunicación sindical más popular, se da en un escenario muy complejo, donde los sindicatos deben también competir por espacios en los mismos medios corporativos que suelen construir narrativas negativas sobre el sindicalismo.

Por eso, entre las propuestas que se van consensuando en la Conferencia, a partir de los puntos contenidos en el Documento Base  que se presentó en las actividades subregionales previas y que se repasa para abrir cada uno de los ejes (Democratización de la Comunicación; Comunicación Popular y Comunicación Sindical), hay acuerdo en que “los sindicatos debemos dar publicidad a los medios alternativos contra los medios financiados por el gran capital”, sintetizó Bárbara Figueroa, secretaria de Desarrollo Sustentable de la CSA.

Mesa con alianzas sociales

Para construir Comunicación Popular, nada mejor que aprender de primera mano las estrategias y herramientas que medios alternativos aliados a la CSA utilizan para crear sus mensajes. Por eso, el debate de esta segunda jornada fue motorizado por las experiencias de la Marcha Mundial de las Mujeres (MMM), Radio Mundo Real (RMR), la agencia América Latina en Movimiento (ALAI), el Foro de Comunicación para la Integración de Nuestra América (FCINA) y el Foro de Jóvenes de FES.

“Aprender y compartir es nuestro punto fuerte”, dijo Helena Zelic (MMM) en referencia a la metodología de trabajo que utiliza el colectivo de comunicación de la Marcha en Brasil, creado en 2013.

“Producimos la comunicación colectivamente: para todas las cosas definimos en conjunto qué vamos a producir, por qué y para qué; así vamos fortaleciendo nuestro movimiento más allá de la comunicación, haciendo proceso de formación técnica y, sobre todo, política”, valoró Zelic.

Hacer comunicación popular es tener “una mano en la bandera y otra en la cámara”, describió la periodista y activista brasileña. “No es sólo llegar al producto y publicarlo y ganar likes, sino participar del movimiento, aprender de los caminos, realizar formaciones, ir a las manifestaciones”.

Tener una visión de comunicación integrada a la política de la organización y al movimiento al que se pertenece es estratégico para construir alianzas y convergencias que fortalecen las luchas. “Siempre tenemos más éxito en las experiencias que hacemos con organizaciones aliadas. Estrechamos nuestras visiones sobre los problemas y proyectamos juntas y juntos el hacer colectivo”, añadió Zelic.

Desde RMR, José Elosegui también coincidió en que la comunicación debe ser parte del proceso de formación política entre los movimientos, como ocurre en la práctica en instancias de convergencia de comunicaciones, como la que ocurre en torno a la Jornada Continental por la Democracia y contra el neoliberalismo.

La lógica de trabajo de comunicación compartida “nos permitió aprender e intercambiar saberes y genera confianza política”, dijo Elosegui.

Como desafíos planteó las tensiones que genera la urgencia de estar constantemente comunicando, atendiendo las necesidades de las organizaciones territoriales que tienen a la radio u otros medios digitales y alternativos como espacios predilectos para transmitir las demandas y propuestas, y la necesidad de dar un debate político profundo sobre los posicionamientos y proyecciones de los pueblos en lucha.

Narrar de primera mano las experiencias desde los territorios es un diferencial que los medios alternativos brindan y puede valorarse desde el movimiento sindical al momento de pensar cómo transmitir su agenda en convergencia con otras organizaciones.

En este sentido, la Convergencia de Comunicación de los Movimientos Sociales, a la que la CSA se sumó en 2019 en el Encuentro de la Jornada Continental por la Democracia y contra el neoliberalismo realizado en La Habana, Cuba, es un espacio a seguir potenciando, ya que permite unificar agendas en común, concluyeron las y los expositores.

Volcarnos mucho más a lo digital

¿Qué hacemos frente a una Internet que sigue siendo restrictiva y escasa para los/as trabajadores/as? “Hemos creado una iniciativa”, respondió Sally Burch, directora de ALAI: “Internet Ciudadana para construir internet de los pueblos, construir alianzas y tener un mayor vínculo con el sector sindical”. Este es un espacio de reflexión para pensar junto a diversas organizaciones “qué estrategias podemos desarrollar para políticas públicas para una internet más democrática, que incluyan capacitaciones sobre el uso de tecnologías libres”.

Pensar cómo nos encontramos desde las pantallas y en las calles, y cómo capitalizar la conexión digital que se potenció al trabajar desde casa, son partes de las propuestas que trajo María Paula Martínez, asesora de Comunicación de FES.

La activista describió cómo, a lo largo de la pandemia de COVID-19, desde el Foro lograron potenciar el ciberactivismo con jóvenes que, si bien podían no conocerse en persona, estaban pensando contenidos para defender sus derechos, dándole un nuevo significado a la democratización de la comunicación, para que tenga aún más carácter global y local.

Martínez remarcó la importancia de que aparezcan las voces en toda su diversidad (defensores/as territoriales, activistas urbanos, trabajadores/as de plataformas, campesinos/as, sindicalistas) aprovechando el teléfono móvil como una herramienta para generar impacto con los mensajes de comunicación política.

Memes, stickers de WhatsApp, videos de Tik Tok, tableros y otras herramientas que superen el mero encuentro en Zoom, es parte de la pedagogía digital que la joven sugirió utilizar, teniendo en consideración cómo se conecta cada uno/a (desde las condiciones materiales hasta vivenciales), cómo podían participar del foro y cómo se puede “mantener una conversación viva desde lo colectivo con jóvenes con quienes nunca nos habíamos visto en la vida real”.

La formación a distancia debe conjugarse con acciones de incidencia, como campañas, cuyos contenidos pueden ser producidos incluso desde el interior de cada casa.

Desde ALAI, el compromiso con los sectores populares implica la formación en políticas y estrategias de comunicación para líderes sociales, ambientales, sindicales, considerando que las dirigencias deben conocer las dinámicas de las comunicaciones alternativas y corporativas para “crear tejido comunicacional con alianzas, generar información en línea, enfocar la comunicación y luchar por la democratización, enfrentando los retos con una plataforma común”.

Cuanto más real es el cambio que se propone, más brutal es el ataque

Desde FCINA, Javier Tolcachier analizó los ataques que el movimiento sindical recibe desde los medios corporativos y cómo puede defenderse desde la comunicación popular. Ante la tendencia a la atomización y la búsqueda del capital por apoderarse de la subjetividad, sugirió fortificar el trabajo en redes para generar contenidos y revertir las tendencias individualistas. Desmonopolizar y articular para vencer las lógicas mercantiles y monopólicas que conspiran contra proyectos comunicacionales comunes.

Los/as delegadas/os de las centrales afiliadas valoraron los aportes de los/as expositores y agradecieron el trabajo coordinado desde la CSA para crear el Documento Base que permita proyectar los próximos tres años de estrategia en la comunicación.

Trazar una hoja de ruta

En el intercambio quedó en claro la necesidad de profundizar en capacitaciones para dar la disputa de narrativas con los medios hegemónicos, una disputa que se sabe desigual.

Otros de los desafíos acordados son: cómo recoger experiencias de la región y compartirlas hasta los más remotos lugares donde vive la clase trabajadora, así como llegar a quienes menos posibilidades tienen; recuperar el diálogo, en especial con la clase trabajadora joven, para que valoren a la organización sindical como forma de tener un futuro mejor; y cómo construir alternativas y soberanía tecnológica.

Si la comunicación popular se hace en colectivo, de forma no automatizada, “es importante expresar diferencias o puntos a añadir a la hoja de ruta”, dijo el secretario general de la CSA, Rafael Freire, en el cierre de la jornada.

Lo que se defina este viernes, cuando cierra la Conferencia Continental de Comunicación Sindical, es lo que se va a hacer en la CSA los próximos tres años en materia de comunicaciones. Por eso, Freire llamó a tener metas mínimas para cumplir, considerando la desigualdad de condiciones que existen entre las filiales de la confederación.

El último día de Conferencia continuará el debate en torno a las condiciones necesarias para desarrollar una nueva y mejor Comunicación Sindical y se presentarán las experiencias de AFL CIO, TVT Brasil y FIP , además de que se proyectarán videos de afiliadas.

[Autor des1]Si esto estuviera colgado en algún lado habría que hipervincularlo.

[Autor des2]No estoy seguro qué es esto, por eso no puedo agregar el hipervínculo.

Compartir: