Este 18 de septiembre, la Confederación Sindical de trabajadores y trabajadoras de las Américas (CSA) se une a la conmemoración del Día Internacional de la Igualdad Salarial de la ONU. Este día nos recuerda la importancia de abordar la desigualdad salarial entre géneros y promover el trabajo decente y equitativo en la región para todas las personas, independientemente de su género.

En la Américas, la CSA y la CSI (Confederación Sindical Internacional) celebran la lucha de los sindicatos que han recurrido al diálogo social, a las campañas y a la negociación colectiva para lograr la aprobación de leyes que puedan garantizar la igualdad salarial y la protección de los derechos de las trabajadoras. 

La conciliación entre las múltiples jornadas realizadas por las mujeres entre la vida laboral y familiar a lo largo de la historia, al armonizar el trabajo productivo con el reproductivo, se encuentran en mayor desigualdad que los varones en los trabajos domésticos y de cuidados no remunerados dentro de sus hogares. Esto sumado a que, en ciertos sectores de actividad, las mujeres reciben un salario menor que sus pares varones, o son relegadas a realizar trabajos considerados históricamente feminizados como ser en sectores de la salud, educación, doméstico y de cuidados. 

Reducir la brecha salarial de género es un paso fundamental hacia la igualdad de género entre varones y mujeres por trabajo de igual valor. 

La CSA en su II Conferencia de las Mujeres (2019), hace hincapié en la importancia de contar con la representación de las mujeres los espacios de diálogo y en las negociaciones colectivas, de manera de lograr transformar las organizaciones sindicales y avanzar hacia la paridad en las conducciones; incorporar en los estatutos la paridad de género (en los casos que así corresponda), y asegurar que haya una representación y contemplación de los derechos de toda la clase trabajadora en su amplia diversidad. Incluyendo en las cláusulas de las negociaciones igual salario por trabajo de igual valor, abordando las desigualdades salariales históricas que se dan por género en cada rama de actividad.

“La igualdad salarial es un derecho humano fundamental y una meta que debemos alcanzar en nuestra región. Estas leyes son solo ejemplos de los esfuerzos que se están realizando en las Américas para promover la igualdad salarial. Sin embargo, sabemos que todavía hay un largo camino por recorrer. La CSA se compromete a seguir luchando por la erradicación de la discriminación salarial y a trabajar en colaboración con gobiernos, empleadores y otros actores para alcanzar una sociedad más justa y equitativa”, afirmó el Secretario General de la CSA, Rafael Freire.

La CSA celebra una serie de avances e implementación de normativas específicas en igualdad salarial en algunos países de la región:

Ley de igualdad de Remuneración en Chile (2009): A través de la Ley N° 20.348 se introdujeron modificaciones en el Código Laboral para resguardar el derecho a la igualdad en las remuneraciones. Dentro de esta Ley se destaca el reconocimiento del derecho de las trabajadoras a obtener igual salario que los hombres, por trabajo de igual valor y constituye una obligación para todos los empleadores. En los años 2014 y 2016, un grupo de diputadas parlamentarias han presentado mociones para lograr por un lado modificar nuevamente el Código de trabajo y mejorar los mecanismos para garantizar la igualdad salarial por identificar algunas discrepancias en el proceso de monitoreo y evaluación de la mencionada Ley.

Ley de igualdad de remuneración en Colombia (2011): Dicha Ley N° 1496, establecía disposiciones generales sobre la igualdad de remuneración. A la fecha se está estudiando la posibilidad de modificar dicha Ley, dado que la formulación de la misma no concretaba los medios para su cumplimiento y el texto era ambiguo dado que no garantiza el derecho de igual remuneración por trabajo de igual valor. 

Ley de igualdad Salarial en Perú (2017): En el caso de Perú, en diciembre de 2017 se promulgó la Ley N° 30709 que prohibe la discriminación salarial entre mujeres y varones. Y un año después, se aprobó su Reglamento. En la norma, se restringe al principio de igual salario por igual trabajo e incluye un componente dirigido al fortalecimiento de la fiscalización.Esta es una medida que por primera vez se incluye de manera específica en la normativa de un país de la región. A la fecha se busca que las empresas garanticen salarios libres de sesgos de género, revalorizando el trabajo de las mujeres, por lo que se insta a las mismas instituir políticas que no incurran en la diferencia por motivo de sexo y generar medidas que garanticen un ambiente laboral sin exclusión. 

Ley de Igualdad de Igualdad Salarial en Canadá (2021): Canadá ha implementado políticas de igualdad salarial que prohíben la discriminación basada en el género. El 31 de agosto de 2021 entra en vigor la Ley de igualdad salarial y el Reglamento sobre la igualdad salarial. Entre otros puntos, dicha Ley establece un régimen de igualdad salarial para mujeres y hombres de los sectores regulados por el gobierno federal  a recibir una misma remuneración por trabajo de igual valor y adopta medidas para garantizar la transparencia salarial en las empresas. Asimismo, este régimen se aplica a los empleadores regulados por el gobierno federal con 10 o más empleados, incluidos los empleados que ocupan puestos sindicalizados, no sindicalizados, a tiempo completo, a tiempo parcial, permanentes, ocasionales y temporales. Se crea la figura del Comisionado Federal para la Igualdad Salarial de Canadá, quien integra la Comisión Canadiense de Derechos Humanos y se encarga de la supervisión independiente del régimen legislativo. La mencionada Ley dota al Comisionado de diversos poderes e instrumentos para administrar y hacer cumplir el régimen.

Ley de Igualdad Salarial entre hombres y mujeres en Brasil (2023): El presidente Luiz Inácio Lula da Silva sancionó el pasado 3 de julio de 2023, la Ley nº 14.611, que garantiza la igualdad salarial entre hombres y mujeres, además de modificar la Consolidación de las Leyes Laborales. La nueva ley establece medidas para hacer que los salarios sean más justos, aumentando la lucha contra la discriminación y facilitando los procesos legales para garantizar la igualdad salarial. El objetivo es promover la igualdad de derechos en el trabajo, combatir la pobreza, el racismo, la opresión de las mujeres y otras formas de discriminación social que conducen a desigualdades históricas.

Ley de Igualdad Salarial en Argentina: En su texto constitucional se menciona la justicia salarial en términos generales, y a la fecha se encuentra un proyecto de Ley sobre igualdad salarial dónde se sugiere modificar algunos artículos de la Ley de Contrato de Trabajo N° 20.744. Argentina ha promulgado un Decreto-Ley Nº 11595 donde ratifica el Convenio N° 100 de la OIT sobre igualdad de remuneración.. Estas medidas son un paso significativo hacia la equidad de género en el ámbito laboral. 

Ley de Igualdad de trato y oportunidades para ambos sexos en la actividad laboral  en Uruguay: A la fecha existen varias legislaciones nacionales que abordan las desigualdades y discriminaciones por razones de género y aseguran la igualdad entre hombres y mujeres. Ha de destacar la implementación en la reglamentación de un salario mínimo nacional, entre ellos el del Trabajo Doméstico, que ha sido una de las reivindicaciones del movimiento sindical y sus mujeres trabajadoras. Al igual que Argentina, en el texto constitucional de Uruguay menciona la justicia salarial en términos generales y también ha ratificado el Convenio N° 100 de la OIT pero aún hay una faltante en la elaboración de una Ley de igualdad Salarial en el país. 

Ley contra la discriminación salarial de las mujeres en Estados Unidos: En los Estados Unidos, se han promulgado leyes federales y estatales para abordar la discriminación salarial entre géneros. En el año 2009, se firma la Ley Lilly Ledbetter, contra la discriminación salarial de las mujeres y fortalece la capacidad de las trabajadoras para buscar reparación en casos de discriminación salarial en igualdad de condiciones con sus pares varones. Si bien la Ley no acaba automáticamente con la discriminación salarial, sólo permite que las personas damnificadas puedan recurrir ante los tribunales y cuyo plazo para hacerlo es de 180 días después de recibir la nómina en cuestión. A la fecha, es el único país de las Américas que aún no ha ratificado el Convenio N° 100 de la OIT.

Hacia una Ley de pago igualitario en México: Desde hace ya unos años, México viene trabajando por garantizar la igualdad de remuneración entre mujeres y varones y erradicar la discriminación salarial contra las trabajadoras. Es por ello, que a marzo de este año, la Cámara de Diputados ha aprobado un dictámen que adiciona la Ley General para la Igualdad entre mujeres y hombres, con el fin de fomentar, a través de la política nacional en la materia, el pago de la misma remuneración a trabajos de igual valor. La misma fue enviada al Senado de la República para sus efectos constitucionales.

Entendemos la importancia de promover a la interna de las empresas la implementación de una metodología de evaluación objetiva y no sexista de los puestos de trabajo con enfoque de género elaborada por la OIT en el 2008, de manera de aplicar el principio de igualdad salarial por trabajo de igual valor y revertir las brechas salariales de género. Para ello se hace imprescindible la conformación de Comités Paritarios de Igualdad Salarial a la interna y comenzar con un exhaustivo estudio sobre aquellos puestos de trabajo donde existen desigualdades.

En este Día Internacional de la Igualdad Salarial, instamos a todas/os a unirse por el fin de la brecha salarial para que hombres y mujeres reciban un salario justo y equitativo por trabajo de igual valor.

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