En el contexto de las movilizaciones del Paro Nacional, iniciadas el pasado 13 de junio, la Confederación Sindical de trabajadores y trabajadoras de las Américas (CSA), representativa de más de 50 millones trabajadoras/es en la región, al lado de nuestra central afiliada CEDOCUT, nos solidarizamos con las familias de las personas que perdieron sus vidas, así como los más de cien heridos, resultado de la represión del gobierno de Guillermo Lasso a las movilizaciones indígenas y sociales encabezadas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) en el marco del Paro Nacional. De igual forma, exigimos a las autoridades que se respete el debido proceso para las personas detenidas en las protestas, sin vulnerar sus derechos constitucionales.
El 25 de junio, la Misión de Solidaridad Internacional y Derechos Humanos difundió un informe puntualizando las violaciones de derechos humanos. Según el informe, cinco personas fueron asesinadas a manos de las fuerzas policiales, con el uso irregular de armas de disuasión de forma letal. Sobre las detenciones arbitrarias, indicaron más de 132 detenidos de forma arbitraria por ejercer el derecho a la protesta. En muchos de estos casos dichas personas fueron imputadas luego por delitos tales como sabotaje, terrorismo o resistencia.
La misión ha recolectado testimonios sobre secuestro, persecución y planificación de atentados en contra de la integridad de líderes y lideresas indígenas y sociales, violación al derecho a la protesta social, violación a las garantías judiciales y acceso a la justicia de los ciudadanos (no recepción de denuncias en fiscalías, no investigación de oficio de hechos de violencia policial, entre otros), negación de atención medica por las instituciones públicas de salud por motivos raciales y anti indigenistas y violación a la integridad de las mujeres, evidenciando episodios de humillación, violencia verbal y simbólica.
La Misión puntualizó que los niños y niñas también vieron sus derechos violados, especialmente en el marco de la represión de las movilizaciones, en las cuales las comunidades indígenas participan junto a sus hijos e hijas. Sobre comunicación y derechos como la Libertad de Expresión, los informes apuntan la censura y bloqueo mediático de la información, el bloqueo del servicio de internet y redes sociales, hackeo a cuentas personales de líderes y lideresas indígenas y sociales e intervención en cuentas personales y redes sociales personales, así como el cese del servicio de redes móviles.
Referentes de la CTA Autónoma, Patria Grande, ATE Argentina, Liberpueblo, la Asociación Argentina de Juristas, el FOL y la Federación Argentina de Cartoneros, entre otros, forman parte de la Misión y se encuentran en Ecuador para relevar y denunciar las violaciones a los derechos humanos en el país.
En este sentido, la Secretaría de Solidaridad y Derechos Humanos de la CEDOCUT, envió un comunicado condenando la escalada de violencia suscitada a nivel nacional. La CEDOCUT ha reiterado en múltiples ocasiones que, las acciones de resistencia en las calles, frente a la crisis que vive el país, son pacíficas; sin embargo, el gobierno ha respondido con represión y amenazas a las y los indígenas, campesinos, estudiantes, comerciantes, trabajadores y trabajadoras y el pueblo ecuatoriano del campo y de la ciudad, quienes se movilizan amparados en el artículo 98 de la Constitución sobre el derecho a la resistencia:
“Los individuos y los colectivos podrán ejercer el derecho a la resistencia frente a acciones u omisiones del poder público o de las personas naturales o jurídicas no estatales que vulneren o puedan vulnerar sus derechos constitucionales, y demandar el reconocimiento de nuevos derechos”.
En nota, el vicepresidente de Solidaridad y DDHH de la CEDOCUT, Luis Pozo Paredes, declaró: “Exigimos al gobierno el cese de la violencia y el respeto a la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Es urgente que responda a las demandas de los diferentes sectores y el pueblo ecuatoriano, porque el país está paralizado desde que no existe un empleo digno ni medicina en los hospitales; por el alto costo de los productos de primera necesidad; el aumento de la pobreza, la inseguridad y la corrupción; entre otros problemas que, hasta hoy, no se solucionan a pesar de que las diferentes organizaciones han presentado alternativas para discutir en un diálogo transparente, que busque una salida a la crítica situación que enfrentamos”.
La CEDOCUT también expresó el reconocimiento a las y los ecuatorianos que se solidarizan, con alimentos e insumos para las y los compañeros que se movilizan en varias provincias. De igual forma, a las Universidades que se convirtieron en centros de acogida para recibir a los manifestantes; y, a los Organismos de socorro, personal de salud, y quienes han estado en primera línea salvaguardando la vida y la integridad del pueblo. El llamado a las organizaciones de DDHH solicita la vigilancia y la denuncia de los organismos internacionales: “Exhortamos a las organizaciones de Derechos Humanos, tanto a nivel nacional como internacional, a mantenerse vigilantes y denunciar la vulneración de derechos”.
Al final de la declaración, la CEDOCUT reitera el llamado a la UNIDAD Y SOLIDARIDAD del pueblo ecuatoriano para defender la vida y los derechos humanos.
Foto: CEDOCUT Ecuador
Comunicado DDHH Cedocut 25-06-22