“Afirmamos que la migración sigue siendo un fenómeno histórico, humano y natural, que ha beneficiado y continúa contribuyendo al desarrollo y la humanidad”

Las organizaciones sindicales de las Américas (CSA), países árabes (ATUC), África (ITUC-África), Asia Pacífico (ITUC-AP), Asia del Sur (SARTUC) y de la región de la ASEAN (ASEAN-TUC), emitieron una declaración, en este 25/07, promoviendo los derechos humanos y laborales de los trabajadores y trabajadoras migrantes, así como su derecho al acceso a la vacunación contra el COVID-19.

En el marco del informe de la Comisión de Respuesta a la COVID-19 de la OIT, las confederaciones y consejos continentales sindicales de estas regiones reunidas en el proceso del Memorando de Entendimiento (MoU) emitieron esta declaración con el fin de incluir a estas personas en los procesos de recuperación luego de la pandemia.

Como estipulado en el último Congreso de la CSA, las trabajadoras y los trabajadores migrantes son de las poblaciones más vulnerables social y laboralmente y están expuestas a todo tipo de explotación, violencia y violación de los derechos humanos. Si bien la pandemia ha impactado enormemente a la mayoría de la población alrededor del mundo, las personas migrantes son de las que más han estado sufriendo los efectos de la crisis sanitaria y socioeconómica, sin mencionar los ataques de xenofobia, discriminación y odio que sufren a diario.

Las organizaciones sindicales continentales, continúan destacando el rol imprescindible que cumplen estas/os trabajadoras/es en los países de origen y destino y su contribución excepcional en el combate a esta pandemia. Por este motivo entienden que es urgente que estas personas tengan acceso a todos los servicios de salud con el fin de combatir los daños que crisis está causando a nivel físico y psicológico.

Muchos países aún están lejos de completar o incluso iniciar una campaña de vacunación por no poder acceder a las vacunas y aun en los países desarrollados que han avanzado sustantivamente en el proceso de vacunación, las personas migrantes no han sido incluidas en esta agenda. Por este cometido, la CSA y sus aliados continúan exigiendo la vacunación universal de forma que todas/os las/os trabajadoras/os, incluidos las/os migrantes, tengan la oportunidad de protegerse frente a los impactos de esta pandemia y vean su derecho a la salud garantizado.

Adicionalmente, el movimiento sindical internacional continua su lucha para que se respete la libertad sindical y la negociación colectiva en todos sus ámbitos ya que solo el respeto a la libre organización sindical de las/os trabajadoras/es podrá asegurar el goce y ejercicio de los demás derechos civiles, políticos, económicos y sociales.

 

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