La violencia que enfrentan las mujeres en los lugares de trabajo de todo el mundo, permite concluir que este problema rebasa en efecto las fronteras de los países y los diferentes ámbitos de trabajo.
Durante la 108º Conferencia Internacional de Trabajo, que inició el pasado 10 de junio, se realizó el segundo y último debate de la Comisión Normativa «Violencia y Acoso en el Mundo del Trabajo«, en la cual se adoptaron los instrumentos de um Convenio acompañado de una Recomendación que contribuirán a prevenir y erradicar la violencia en los lugares de trabajo.
El Preámbulo del nuevo Convenio reconoce el derecho de toda persona a un mundo del trabajo libre de violencia y acoso, incluidos la violencia y el acoso por razón de género, aclarando que estos tipos de comportamientos constituyen una violación de los derechos humanos.
Además, el Convenio, reconoce la necesidad de adoptar medidas por parte de los empleadores con relación al impacto que la violencia doméstica tiene en el ámbito del trabajo, así como la inclusión de terceros como partícipes de la violencia y el acoso laboral, ya sea como autores o víctimas de la misma.
Logramos una gran movilización de nuestras afiliadas de la CSA y una numerosa representación de mujeres de las Américas en esta Conferencia, lo que ha permitido incidir de manera estratégica durante todos los trabajos de la Comisión Normativa.
Los resultados obtenidos son la síntesis de años de movilización y lobby con los gobiernos y de las alianzas con el movimiento de mujeres, los que han sido articulados en el caso de las Américas por la CSA y principalmente por su Comité de Mujeres Trabajadoras de las Américas (CMTA).
¡SÍ, SE PUEDE!