La Rerum Novarum considera que durante los últimos años se ha tramado una conjura contra los sectores progresistas que han promovido la democratización, el respeto a los derechos humanos y una más justa y equitativa distribución de la riqueza.
En ese sentido, nos solidarizamos con la clase trabajadora brasileña, con nuestras organizaciones sindicales hermanas y con el compañero Luis Inacio Lula da Silva, Ex Presidente de Brasil y sindicalista perseguido como muchos más en nuestro continente.
Repudiamos la apología fascista al uso de medios de represión militar y argumentaciones legales para impedir la participación de Lula en las elecciones presidenciales.
Condenamos enérgicamente el pacto político-militar-empresarial conservador y neoliberal que ha puesto en marcha este tinglado que hoy amenaza los esfuerzos de construcción democrática y de justicia en esta nación hermana.
Son los mismos sectores que promovieron el golpe de 2016, que siguen atentando contra las instituciones democráticas o tergiversándolas para sus intereses, mientras entregan las riquezas nacionales y entregan a la clase trabajadora a los coyotes del mercantilismo, que no respetan condiciones laborales ni derechos humanos.
La salida para la crisis política, económica y social se encuentra en la realización de elecciones libres y
democráticas con la participación de todas las fuerzas políticas y sin vetos autoritarios a Lula.
Es el respeto al pacto político consagrado en la Constitución brasileña de 1988 que el Supremo Tribunal Federal tiene el deber de proteger.
Nuestra solidaridad con el compañero Lula y con la clase trabajadora brasileña.