La Confederación Sindical de trabajadores y trabajadoras de las Américas (CSA), que representa a 55 millones de trabajadoras y trabajadores en el continente, con 49 centrales nacionales afiliadas en 21 países, y con tres confederaciones afiliadas en Panamá, viene acompañando desde mediados del año pasado la grave situación en el tránsito de personas migrantes por el corredor de Darién, así como el seguimiento de las acciones del gobierno panameño que deben brindarles atención humanitaria básica en la circulación por su territorio.
En la madrugada de este miércoles (15/02) un ómnibus coordinado por el gobierno de Panamá y que se trasladaba desde Darién hasta el albergue en Gualaca, Chiriquí (frontera con Costa Rica) tuvo un accidente en el que murieron, hasta este momento, 39 personas, en su mayoría migrantes, entre ellos cuatro niños.
El gobierno de Panamá recibe en estaciones en Darién a los/las migrantes, registran sus datos biométricos y les ofrecen asistencia de salud y alimentación y luego les coordinan el traslado en este medio de transporte hacia la frontera con Costa Rica para que sigan su camino.
Desde la CSA, nos solidarizamos con los familiares de las víctimas, y lamentamos que personas llenas de esperanzas por un porvenir en mejores condiciones de vida y trabajos dignos terminan perdiéndola tan drásticamente.
Exhortamos al gobierno de Panamá y a los gobiernos de los países de origen de las victimas que se les brinde la asistencia necesaria, sea para el traslado de los cuerpos, sea para la asistencia médica y/o el retorno a sus países naturales en el caso de las personas heridas – como corresponde, según los Convenios y tratados internacionales de derechos humanos, así como también lo han solicitado otras organizaciones y organismos internacionales.